Estudiantes de la Facultad de Medicina de la Universidad de Cuenca y personal del Hospital Vicente Corral Moscoso protagonizaron una marcha este martes 28 de octubre en el centro histórico de la ciudad para exigir al gobierno nacional la dotación inmediata de medicamentos, insumos, equipamiento y personal médico. La movilización, que partió del Parque San Blas y culminó en los bajos de la Gobernación del Azuay, responde a la crisis crónica en el sistema de salud local, agravada por la saturación en hospitales del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) y del Ministerio de Salud Pública (MSP). Los manifestantes piden declarar en emergencia el sector para agilizar compras y contrataciones, ante listas de espera que superan el año en procedimientos quirúrgicos.
La protesta reunió a decenas de participantes, quienes portaban pancartas con mensajes como “La salud está en la lucha” y denunciaron el colapso operativo de centros como el Vicente Corral Moscoso, único hospital de tercer nivel del MSP en Cuenca, y el José Carrasco Arteaga del IESS. Según datos recopilados por el medio digital Red Informativa, dos pacientes intervenidos en agosto y septiembre de 2025 esperaron más de un año para cirugías, un retraso que refleja la sobrecarga general en la red hospitalaria.
Saturación quirúrgica y antecedentes de desabastecimiento
Un informe oficial del IESS, publicado el 25 de septiembre de 2025 en el portal de compras públicas, revela que 13.354 pacientes esperan cirugías desde hace más de 90 días a nivel nacional, con un impacto de más de 17.000 años de vida saludable perdidos y costos estimados en USD 119 millones. En este sentido, el Hospital José Carrasco Arteaga ocupa el sexto lugar entre los centros del IESS con más intervenciones represadas, afectado por saturación en áreas como traumatología, oftalmología, urología y cirugía general.
Pedidos de la protesta
Los manifestantes criticaron las políticas nacionales, como la reducción sistemática de presupuestos al IESS, que en 2025 prevé un déficit de USD 617 millones en salud, obligando a desviar fondos de otros rubros. “El centro hospitalario está colapsado y en crisis”, afirmaron representantes del personal del Vicente Corral Moscoso durante la marcha. Además, el hospital recibe pacientes de provincias aledañas como Cañar, Morona Santiago y Loja.
La marcha culminó con una entrega de petitorio a la Gobernación, solicitando intervención urgente. Mientras tanto, pacientes continúan acumulando esperas que, en casos extremos, alcanzan los tres años. El Hospital José Carrasco Arteaga, inaugurado en 2000, atiende anualmente 150.000 consultas y 3.500 cirugías, pero enfrenta deudas con proveedores que limitan su capacidad.
