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En medio de un país marcado por protestas, bloqueos de vías y un clima político convulso, la convocatoria a una Asamblea Constituyente divide opiniones. Mientras el presidente Daniel Noboa apuesta por una consulta popular para cambiar las reglas del juego, distintos sectores cuestionan si este es realmente el momento adecuado para abrir un proceso de esta magnitud.

Sobre este escenario, Fernando Rodríguez, consultor político, analizó en Manavisión Plus las oportunidades y riesgos de la propuesta oficial. En su criterio, el contexto político puede parecer favorable, pero el social y económico no lo son. Advierte que, si el Gobierno de Noboa no maneja con cuidado el descontento ciudadano, podría llevarse una sorpresa en las urnas el próximo 16 de noviembre.

Más allá de si es legítima o si es constitucional la propuesta ¿cree que es el momento ideal para hacer esta convocatoria y que el país vaya a una consulta y se pronuncie sobre una nueva Asamblea Constituyente?

La pregunta es súper clara y, sobre todo, me parece que es una pregunta que responde a lo actual. Yo creo que si es el momento o no, podríamos tener varios criterios. Creo que el momento político puede ser el idóneo, pero me parece que el momento social y económico del país no es el adecuado. ¿Es inminente una asamblea, una convocatoria o una elección de Asamblea Constituyente? Sí, creo que la Corte Constitucional ha dicho y ha dado la vía para que esto pueda suceder a través del decreto ejecutivo del presidente y también del llamado a elecciones a través del Consejo Nacional Electoral. Es inminente que vamos a ir a las urnas, pero luego está en si es pertinente este contexto en el que estamos viviendo para que se lleve a cabo una Asamblea Constituyente. Vamos a ver qué pasa en estos próximos días.

-¿Considera usted que el descontento ciudadano que vemos hoy en las calles —protestas, marchas, bloqueos— podría trasladarse al momento de la votación y decidir un “sí” o un “no”?

Sí, yo creo que si el Gobierno no lo sabe manejar de aquí hasta que se lleve el día de la votación, puede ser que este malestar y este descontento de la población, que va en aumento —porque el Gobierno no ha tenido la capacidad para poder sentarse a negociar— (…) puede llevarse tal vez un susto. A veces ganar por poco  es perder. Y el Gobierno, insisto, si no lo sabe manejar, puede llevarse una sorpresa el 16 de noviembre, que es la fecha que tentativamente y preliminarmente se sabe que vamos a ir a la consulta.

-La mayoría insiste en el diálogo. ¿Por qué el Gobierno de Daniel Noboa no lo entiende así?

Tenemos dos episodios en los últimos cinco o seis años, 2019 y 2022, con estallidos sociales por políticas sobre combustibles. Hubo negociaciones y no se llegó a buen fin; quedaron baches en salud y educación. Antes se resaltaba del presidente Noboa que tomaba decisiones y esa valentía daba confianza. Hoy esa narrativa se ve un poco lesionada. Cito lo de la concesión minera en Cuenca como ejemplo de que el Gobierno dio su brazo a torcer. La protesta crece en sectores que se van sumando.

-En concreto, ¿qué busca el Gobierno Nacional con la Constituyente?

Cambiar la Constitución, cambiar las reglas del juego, la normativa. Pero el Presidente no ha explicado hacia dónde nos quiere llevar. Dice que la actual Constitución tiene un corte de izquierda y le impide hacer cosas, pero no ha descrito cuál es ese mejor modelo ni para quién sería mejor.

-¿La Constituyente puede polarizar más al país?

Sí. Si hay normas que atropellen mayorías o que no reconozcan derechos de minorías históricamente excluidas, y si la Constitución queda a medida del Presidente, la polarización crecerá; frente a lo que garantiza la de Montecristi.

Otro tema que se cuestiona es la distribución de escaños. Hay provincias que quedarían con un representante, ¿de qué manera las perjudica aquello?

La fórmula deja con un solo escaño a provincias de la Sierra Centro y la Amazonía, donde Noboa tuvo alta votación. Si alguien gana con 50,01% y otro pierde con 48%, esa gran minoría queda sin representación. Allí la discusión se torna un poco maquiavélica.

-¿Eso en torno a las provincias y en cuanto a la representatividad de los partidos políticos? 

Bueno, también el método D’Hondt y toda esto, incluso la pregunta del financiamiento de los movimientos y partidos políticos hace que la carga negativa sobre los partidos políticos sea aún mayor. Es decir, en estas seccionales que se avecinan en el 2027, lo que va a ocurrir es que muchos movimientos y partidos políticos, que son provinciales, cantonales, nacionales, muy pequeños,que no logren meter ningún alcalde o concejal y que  que vengan arrastrando una tarjeta amarilla del CNE,  lo que hacen es que posiblemente desaparezcan. Eso si no logran una alianza con un movimiento o un partido.

Y la discusión es esa ¿Hasta dónde los movimientos pueden salirse de su agenda programática de los partidos,  incluso dejando a un lado su ideología política para sobrevivir  dentro de las disputas de partidos en elecciones. Entonces, eso hace que la representación también se pierda.  ¿Por qué? Porque los movimientos, la cantidad de movimientos responde a la cantidad o a la diversidad de pensamientos que hay.  Eso en un escenario ideal.

¿Y el financiamiento a partidos y movimientos?

Por un lado, yo creo que es beneficioso quitar el financiamiento  con el objetivo de tal vez estos partidos pequeños,  que no tienen mayor preponderancia, dejen de existir.  Pero por el otro lado también hay opiniones en contra  y que yo estoy de acuerdo porque el financiamiento puede ser ilícito y allí son las grandes chequeras, el dinero mal habido, que va a poder financiar campañas electorales, y obviamente, eso repercutirá en los intereses cuando ya están esas autoridades electas.

-Si analizamos el costo – beneficio, ¿realmente necesitamos una constituyente, es más lo que se gana que  lo que se pierde hablando ya desde la ciudadanía?

Creo que es más lo que se pierde. Tres elecciones —consulta, constituyentes y aprobación del texto— costarían 200–250 millones. Con hospitales, escuelas e infraestructura urgidos, no vale la pena si no resuelve problemas reales. Yo creo que el ejercicio de la construcción de esta nueva Constitución va a estar más politizada que pensar en las necesidades y en ese nuevo marco normativo que necesita el país para solucionar los problemas. Creo que va a ser una Constitución, tal vez a medida del gobernante que hoy está abanderando la creación de una nueva Constitución (…)

-Si gana el NO, ¿qué alternativas le quedan al Gobierno?

Pocas. Se juega su capital político en esta pregunta. Si pierde, habrá más contrapesos legales y un discurso de decisiones con tinte autoritario. Si gana el , deberá ir consolidando paso a paso. Me parece que si gana el no en esta pregunta no le quedan muchos caminos al presidente  para impulsar lo que él viene diciendo en su discurso. Un nuevo Ecuador, un Ecuador lejos del pasado, lejos de los corruptos, lejos de esta normativa que protege a delincuentes. 

¿La ciudadanía está consciente de lo que implica aprobar una Constituyente?

No del todo. Hace falta pedagogía: menos marketing y comunicación digital, y más política y diálogo. La pregunta clave es: ¿estamos mejorando? Los indicadores pueden verse bien, pero si alguien muere por falta de diálisis, de poco sirve que baje el riesgo país.

-Si el 16 de noviembre gana el y todo avanza, ¿ya no hay excusas para no gobernar?

El Presidente ya tendrá dos años. No podemos seguir pidiendo tiempo. En seguridad e IVA hay medidas de más de un año; el Gobierno queda debiendo. Hay que exigir resultados.

¿Qué lecciones considera usted que debería sacar a limpio el Gobierno para no repetir los mismos errores del pasado?

No encerrarse a decidir. No subestimar líderes sociales (…) Yo creo que muchos de ellos están a favor de que se eliminen,  por ejemplo, el subsidio al diésel,  pero esa eliminación tiene que tener mecanismos que ayuden a amortiguar ese impacto. Por ejemplo, yo creo que uno de los mecanismos que puede tomar el gobierno es volver a bajar el IVA. ¿Por qué no bajarlo del 15 al 12? si el problema de la inseguridad persiste.

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