
Técnicos de planes de manejo de páramo en la Zona Tres de Patate confirmaron la existencia de al menos tres variedades de mortiño en las zonas altas de este cantón tungurahuense.
César Freire, responsable del equipo técnico, explicó que el mortiño negro, rojo y blanco están siendo estudiados para determinar sus características científicas y su potencial de aprovechamiento productivo.
Actualmente, el equipo trabaja en la elaboración de vino de mortiño como parte de un proyecto piloto. Las pruebas iniciales arrojaron diferencias notables en sabor y aroma, dependiendo de la variedad.
“El blanco tiene un ligero sabor a chicha, el rojo resulta más dulce y el negro conserva las características clásicas del vino”, indicó Freire. Los procesos de fermentación se han realizado durante 20 días para obtener los primeros resultados.
Freire recalcó la importancia de identificar científicamente las especies de mortiño, debido a su potencial endémico y valor cultural en las comunidades andinas.
El proyecto se desarrolla en sectores como San José de Palo, Marcos de Espinel, Baquerizo Moreno, San Jorge de Patate, El Suque y El Triunfo, donde los páramos albergan la mayor concentración de mortiños silvestres.
Los técnicos esperan avanzar en la investigación y promover productos derivados del mortiño que beneficien a la economía local y fortalezcan la conservación del ecosistema. (I)